PRIMERA INTERVENCIÓN:
Se ha procedido a desmontar la parte eléctrica, para sustituir el casquillo y el cableado, llave y enchufe.
SEGUNDA INTERVENCIÓN:
Se ha desmontado la segunda corona.
Con sus abalorios se ha procedido a
completar los colgantes dobles que faltaban en la corona superior;
y se ha añadido un tercer abalorio a los de la corona inferior,
que ahora son de tres cristales.
Asimismo, para que la segunda corona tenga una mayor longitud,
se han alargado las cadenitas que sostienen la corona inferior
con los eslabones que sostenían la segunda.
TERCERA INTERVENCIÓN:
A la segunda corona se le han puesto a la medida las cadenitas que la sujetan a la altura deseada.
Se le han confeccionado unos "abalorios" rectangulares, planos,
de cristal blanco moteado,
cortados y trabajados respetando el dibujo de la plancha de vidrio;
cada pieza fue encintada en cobre y estañeada,
soldándo una anilla para su sujección.
Y aqui está el resultado...
La importancia del cristal se percibe más cuando se ilumina...
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